La tricomonosis y la campilobacteriosis genital son dos enfermedades de transmisión sexual del ganado bovino. La primera está producida por un parásito protozoo, Tritrichomonas fetus (Tf). La segunda por una bacteria, Campylobacter fetus subsp. venerealis (Cfv). Ambas enfermedades cursan con fallo reproductivo temprano y transitorio. Son más frecuentes en los sistemas de explotación extensivos donde se utiliza la monta natural. El uso de la inseminación artificial en el ganado vacuno de leche provocó prácticamente su desaparición y que se les dedicara menos atención. Los trabajos del grupo SALUVET (Facultad de Veterinaria de Madrid) han puesto de manifiesto la importancia de ambas enfermedades en el ganado de carne, tanto en los sistemas de dehesa como en los de montaña. La localización preferente de estas dos infecciones es la cavidad prepucial del toro y la transmisión es directa de animal infectado a animal sano mediante la cópula. En los rebaños infectados se observa una disminución de la fertilidad, con alargamiento del periodo entre partos y, en consecuencia, un menor número de terneros nacidos por año. Ambas enfermedades son asintomáticas en el semental. En la hembra se observan pérdidas de gestación en el primer tercio, pudiendo acompañarse de vaginitis cervicitis y/ endometritis moderada, aunque no es habitual. Las vacas infectadas suelen eliminar la infección, aunque un porcentaje de las mismas pueden quedar como portadoras. Determinados hábitos de manejo facilitan la transmisión de la infección y dificultan su control, como la utilización de sementales compartidos, el uso de pastos comunales y la ausencia de pruebas diagnósticas en los animales de nueva adquisición. Recientemente se ha comenzado a realizar controles en los sementales del País Vasco que suben a determinados montes comunales, y ya se han detectado algunos animales infectados por Tf. En el caso de la tricomonosis bovina, conviene destacar que no existe tratamiento eficaz ni hay vacunas registradas en el estado español. De cara al control de estas dos enfermedades venéreas y de otras (IBR, BVD, neosporosis y paratuberculosis), las Diputaciones Forales, el Dpto. de Sanidad Animal de NEIKER y otros agentes del sector están trabajando en un plan sanitario que sirva de modelo a la hora de implementar las medidas más eficaces. Desde el Dpto. de Sanidad Animal de NEIKER, además de poner a disposición del sector los métodos de diagnóstico clásicos (cultivo) y novedosos (PCR), se han realizado diversas actividades de formación en estas enfermedades de importancia creciente.