En este año 2020 se cumplen 30 años de la defensa de las primeras tesis doctorales realizadas en el Departamento de Sanidad Animal de NEIKER (antes SIMA). Desde este blog queremos recordarlo dando unas pinceladas de la historia del centro que lo ha hecho posible, y rindiendo homenaje a los pioneros que gestionaron e iniciaron la andadura del actual Departamento de Sanidad Animal. El Servicio de Investigación y Mejora Agraria (SIMA) se constituyó en el año 1981 para ejecutar la reciente transferencia de competencias en Agricultura al Gobierno Vasco, sobre la base del llamado Laboratorio Pecuario Regional del País Vasco que, desde 1975, tenía su sede en Derio. El gestor del proceso fue el Viceconsejero de Agricultura, Jose Manuel Goicoechea, veterinario navarro iniciado en la práctica clínica en la cooperativa Lurgintza (Azpeitia, Gipuzkoa). Para ello tuvo el apoyo técnico de dos investigadores agrónomos, Dunixi Gabiña y Paulino Corcuera, para diseñar una estructura de servicio e investigación, esencialmente orientada a la sanidad y a la producción ganadera y agrícola, contando con las infraestructuras del Laboratorio Pecuario Regional de Derio y de la Estación de Mejora de la Patata de Arkaute. Se establecieron varios departamentos en el SIMA, el Departamento de Sanidad Animal, de Bioquímica, Toxicología y análisis químicos, de Nutrición, de Edafología, y de Horticultura. Además, buscando la solidez científica y la innovación, Goicoechea se dirigió a un viejo compañero de estudios que por entonces estaba iniciando su carrera docente en la universidad de Zaragoza, Juan Jose Badiola. Badiola propuso como director del SIMA a un investigador de enorme personalidad y formación enciclopédica, Joaquin Camón, entonces recién incorporado a la práctica rural tras un periodo de formación doctoral en Madrid y post-doctoral en Gante que aceptó el doble desafío de dar un servicio de diagnóstico laboratorial a los veterinarios clínicos y técnicos vascos y de iniciar la investigación de los problemas endémicos del sector ganadero vasco. Con esos planteamientos, comenzó la andadura del Servicio de Investigación y Mejora Agraria (SIMA), y, por ende, del Departamento de Sanidad Animal, una estructura basada tanto en las disciplinas etiológicas tradicionales de Microbiología, Parasitología y Virología, como en las instrumentales transversales de Serología y Anatomía patológica. Precisamente, la anatomía patológica, introducida en el SIMA por la especialidad de ambos investigadores, Badiola y Camón, fue el primer elemento diferencial del Departamento de Sanidad Animal de este centro, respecto a los pre-existentes laboratorios pecuarios. A esa estructura, tras un proceso de selección en el IVAP, en 1982 se incorporó un grupo de jóvenes licenciados en veterinaria formado por Juan Marco en Microbiología, Carmen Sáez de Ocáriz en Serología, Juan Luis Gelabert en Virología, Luis Cuervo en Anatomía patológica, y Ramón Juste en Parasitología. Sus desafíos fueron, por tanto, por un lado dar un servicio ágil y amplio a un sector cuya experiencia de apoyo laboratorial hasta el momento había sido escaso y, por otro, desarrollar un centro de investigación que abordase los problemas endémicos de la sanidad animal vasca. La actividad del servicio de diagnóstico se implantó de inmediato y se establecieron los contactos con los veterinarios clínicos en ganado vacuno de leche, en ovino (que estaban iniciando la actividad) y, en animales de compañía. Gracias a ello se iniciaron las dos líneas de investigación que más rendimiento científico han tenido en el área de la sanidad animal de la CAPV: el estudio y control del Maedi y de la Paratuberculosis. Partiendo de cero, solamente llevó uno y dos años, respectivamente, alcanzar los dos primeros hitos científicos veterinarios en España: la primera descripción de la paratuberculosis en vacuno y la detección del Maedi-Visna de las ovejas. Los dos temas, autónomamente, permitieron la formalización de la actividad investigadora con la defensa de las correspondientes tesis doctorales en 1990 en la universidad de Zaragoza, las primeras realizadas en el departamento de Sanidad Animal del SIMA. Este hito que recordamos ahora, hizo que, en 1998, al adaptar la personalidad jurídica del centro a las demandas de gestión de una investigación más ágil y competitiva, y ya fusionados con el Centro de Investigación y Mejora Agraria de Arkaute (CIMA), NEIKER la nueva empresa pública, ha contado con todos los investigadores de plantilla formados como doctores. Hoy día, con un promedio de 23 publicaciones científicas anuales, en el Departamento de Sanidad Animal se han formado un total de aproximadamente 30 doctores, algunos de los cuales permanecen en NEIKER, mientras que otros han sido contratados por diversas universidades, centros de investigación o empresas privadas. Esto ha situado la producción de los investigadores de NEIKER en las primeras posiciones de las ciencias veterinarias del estado.
Fotografía: NEIKER-Sanidad Animal