La picadura de las garrapatas además de ser molesta puede transmitir infecciones y puede producir alteraciones en el sistema inmunitario. El síndrome de alfa-gal (SAG) suele tener como origen la picadura de una garrapata que trasmite un glúcido que se llama alfa-Gal (α-Gal). En algunas personas, provoca una alteración del sistema inmunitario y, más tarde, produce reacciones alérgicas que pueden ser desde leves a graves. Cuando estas reacciones se producen, ocurren entre tres y seis horas después del consumo de carne roja y otros productos de origen animal. El SAG está diagnosticado en Europa, Estados Unidos, Australia y Asia, donde diferentes especies de garrapatas transportan las moléculas α-Gal, entre ellas Ixodes ricinus, muy abundante en la CAPV.
El α-Gal es un oligosacárido presente en células y tejidos de mamíferos no primates y en la saliva de las garrapatas. Los humanos no pueden sintetizar el glúcido α-Gal y, por lo tanto, se produce una respuesta del sistema inmunitario frente a él. Los anticuerpos IgM e IgG anti α-Gal se producen constantemente en el cuerpo humano, por ejemplo, frente a bacterias del tracto intestinal que tienen este sacárido en su membrana externa. Sin embargo, el problema aparece cuando en algunas personas se producen anticuerpos IgE dirigidos contra el α-Gal, y que pueden dar lugar a reacciones alérgicas por vías diferentes como las reacciones retardadas producidas tras la ingestión de carne roja, y la reacción inmediata por la picadura de una garrapata, entre otras.
Los investigadores consideran que aquellas personas que tienen reacciones anafilácticas frecuentes y sin explicación, y a las que se realizaron pruebas para detectar otras alergias a los alimentos con resultados negativos, podrían verse afectadas por este síndrome. El problema se soluciona evitando el consumo de la carne roja y otros productos de origen animal.
Recientemente hemos colaborado en un estudio liderado por RemAb Therapeutics (Mòdul de Recerca B, UAB Bellaterra, Barcelona) que presenta una inmunoterapia basada en α -Gal-glicoconjugados poliméricos para tratar potencialmente los trastornos alérgicos mediante la inhibición selectiva de los anticuerpos IgE anti- α Gal. Además, se desarrolló un modelo animal de sensibilización a α Gal en ratones GalT-KO mediante la administración intradérmica de extracto de glándula salival de garrapata, imitando el mecanismo de sensibilización postulado en humanos. El estudio sugiere el potencial uso clínico de los α Gal-glicoconjugados basados en poli-L-lisina para el tratamiento de trastornos alérgicos mediados por anticuerpos IgE anti-α Gal.
Link al artículo:Frontiers | Poly-L-Lysine-Based αGal-Glycoconjugates for Treating Anti-αGal IgE-Mediated Diseases | Immunology (frontiersin.org)